
El Trastorno del Espectro Autista (TEA), al igual que cualquier otra condición, debe ser detectado o diagnosticado por profesionales en la materia, pues no sólo se trata de saber o no que tienes autismo, o que algún familiar lo tenga, sino que se Deben seguir ciertos tratamientos y directrices para que la persona con TEA pueda desarrollarse con la mayor fluidez posible en su vida cotidiana.
Es por eso que, en este artículo, indicaremos cuáles son los profesionales que pueden ofrecer un diagnóstico veraz, si se cuenta o no con esta condición, y los siguientes pasos a seguir.
El TEA debe diagnosticarse por un equipo multidisciplinario
Antes de adentrarnos en el tema de quién o quiénes deben diagnosticar el TEA, es oportuno recordar qué es el autismo.
El autismo no es más que una condición que dificulta la interacción con otros, así como la comprensión del lenguaje y las emociones de las personas que lo rodean.
Además, quienes presentan esta condición se comportan de manera repetitiva, y muestran otras señales dependiendo del tipo de autismo que tengan.
Asimismo, es importante destacar que estos síntomas y sus niveles de gravedad pueden variar considerablemente.
En la actualidad, existe una clasificación que categoriza en tres grados o niveles de severidad el Trastorno del Espectro Autista, que les permite a los especialistas personalizar el tratamiento o dinámicas que deben aplicar, dependiendo de cada caso.
Para ello, se realiza una evaluación exhaustiva de la mano de profesionales de diferentes disciplinas entre las que destacan: psicología, psiquiatría, pediatría, terapeutas de lenguaje y neuropsicológicos, principalmente.
No obstante, este equipo no trabajará solo. También lo hará con los padres o parientes cercanos de quienes tengan esta condición, pues ellos verán en sus hijos o familiares señales que los llevarán a acudir a estos especialistas.
Señales que, por cierto, pueden variar de acuerdo a la edad de la persona; por lo que este equipo multidisciplinario debe tener experiencia y conocer la presentación del autismo en bebés, niños, adolescentes y adultos.
La evaluación diagnóstica del autismo suele incluir pruebas de desarrollo, observación directa, entrevistas con los padres o cuidadores y pruebas para la detección de esta condición.
Esto quiere decir que no se trata de una prueba única, sino de una evaluación integral en la que podrán medir el comportamiento y desarrollo del individuo.
¿Qué evalúan estos profesionales de acuerdo a su especialidad?
Como hemos visto, el autismo afecta al desarrollo del individuo en varios aspectos, es por ello que, en el siguiente apartado, les diremos la importancia de la participación de cada uno de los expertos al momento de realizar un diagnóstico de autismo.
Los psicólogos se encargarán de realizar pruebas de desarrollo, evaluaciones cognitivas y conductuales, además de recolectar toda la información sobre el comportamiento del individuo.
Para ello, suelen recurrir a la aplicación de pruebas (el ADOS-2 y el ADI-R) y pruebas específicas para evaluar los síntomas del autismo.
Aunado a ello, estos profesionales podrán proporcionar una comprensión detallada del comportamiento y desarrollo del individuo, ayudando así a determinar si cumple con los diagnósticos de autismo.
Por su parte, los psiquiatras, por ser médicos especializados en trastornos mentales, descartarán o no cualquier problema médico subyacente que pueda estar aumentando o empeorando los síntomas del TEA.
De igual manera, evalúa los trastornos del sueño, de ansiedad o depresión, así como los trastornos de atención e hiperactividad.
El pediatra uno de los especialistas clave para detectar el autismo
En este mismo orden de ideas, debemos acotar que la participación de los pediatras en el diagnóstico del autismo también es fundamental, pues es el primer profesional en detectar o sospechar si un infante tiene o no esta condición, gracias a que ellos son quienes evalúan el desarrollo integral de los pequeños en relación a su edad. .
Además de estos tres profesionales en el área de la medicina, existen otros expertos que pueden determinar si una persona se encuentra dentro del TEA, como los neuropsicólogos y los terapeutas ocupacionales.
En el caso de los neuropsicólogos , ellos son los expertos en estudiar la relación entre el cerebro y el comportamiento de los individuos. Una evaluación de este tipo medirá el rendimiento cognitivo, el lenguaje, la memoria, la atención y otras habilidades con el cerebro.
Mientras, el terapeuta ocupacional tiene la tarea de revisar cómo se desenvuelve la persona en sus actividades cotidianas, su relación con el ambiente físico y social, determinando si este afecta su capacidad de llevarlas a cabo.
Otros especialistas que pueden diagnosticar el espectro autista
Aunado a esto, el terapeuta ocupacional puede evaluar las habilidades motoras finas y gruesas, la coordinación, atención, percepción y procesamiento sensorial, rendimiento en tareas específicas como jugar, escribir y, por supuesto, su comportamiento durante su ejecución.
Aunque ellos también pueden dar un pequeño diagnóstico, es más común que su trabajo se enfoque en mejorar o ayudar a la personas con autismo ya detectado, a través de herramientas que permitan el neurodesarrollo de quienes tengan esta condición.
Sin duda alguna, realizar una detección de la condición de autismo es compleja y, como hemos apreciado, involucra muchos sectores y factores, siendo los profesionales en la materia un eslabón vital para ello.
Pero la observación de los padres en el comportamiento de sus hijos es primordial para que esta evaluación y diagnóstico se hagan de manera oportuna.
Por lo que la detección temprana contribuirá a mejorar las condiciones de quien tenga el TEA ayudando, a su vez, a su desarrollo y desenvolvimiento.